XV Conversación Clínica del ICF-E. "Homosexuales en análisis"
19/01/2015
Flash de Andrea Freiria
Dicho de otra manera, cuando el sujeto "reprime", eso no quiere decir que se rehúse a tomar consciencia de algo que sería un instinto –pongamos por caso un instinto sexual que quisiera manifestarse en forma homosexual–, no, el sujeto no reprime su homosexualidad, reprime la palabra donde esta homosexualidad juega un papel significante.
Jacques Lacan, L’EXPRESS, 31/ 5/ 1957, nº 310 (p. 20-22)
Respuesta de Andrés BorderÃas
Psicoanalista, AME de la ELP. Docente del ICF Madrid- Nucep. Director del CPA.
En esta interesante entrevista realizada por el semanario L'Express, Lacan, en un tono sorprendentemente claro, despliega las coordenadas de la dimensión significante del inconsciente. Lo reprimido, es una verdad. Mejor tomemos a Champollion que a Colón como referente, pues se trata del desciframiento del inconsciente y no del descubrimiento de un continente ignoto. La homosexualidad…no se trata de una fuerza pulsional contenida, una amenaza latente, que tanto atormentó a los representantes de los “valores viriles” de los años 50. Lo reprimido es un significante. Y qué mejor ejemplo para seguir las consecuencias de esta afirmación que la relectura del caso del Hombre de los Lobos, que el propio Lacan había abordado en 1952, y sobre el que había vuelto tres meses antes de esta entrevista, en la Respuesta al comentario de Jean Hyppolite, para ubicar el concepto de forclusión y su incidencia en el caso.
Vayamos al grano: Freud trata los síntomas intestinales del Hombre de los lobos como el retorno de ese reprimido que es la homosexualidad. El sujeto se identificó con la posición de la mujer o de la madre en el acto sexual, que es otra manera de decir la fijación de la posición homosexual inconsciente: ser poseído por el padre como una mujer. Lo fundamental para Lacan desde la perspectiva que adopta en esa época y en la entrevista es que la posición homosexual reprimida del sujeto se expresa en la lengua anal, tal y como Freud desarrolla en el capítulo VII del caso: El erotismo anal y el complejo de castración.
La lectura atenta del caso y del excelente comentario del mismo hecho por J.A.Miller (1) es una referencia obligada para profundizar en la problemática de este punto concreto.
(1) J.A.Miller, El Hombre de los lobos. Un seminario de investigación psicoanalítica, Ed.Gredos, 2011.